Con tantos avances tecnológicos en los últimos años, es difícil acompañar las novedades que llegan a las instituciones por todo el mundo. Impresoras 3D y 4D, wearables, comprimidos con chips, kinect, tablets, cirugía con la punta de los dedos y robots son algunas de las tendencias que ya están en uso actualmente por hospitales con buenos resultados. ¿Está curioso por conocer esas innovaciones y comprender como pueden colaborar con la gestión hospitalaria y en la mejora de la atención a la salud? Acompañe nuestra selección:


Kinect

La tecnología kinect, creada por Microsoft para formar parte del videojuego Xbox, permite que el jugador controle su avatar y confirme los comandos sin la necesidad de una maneta. Eso es posible porque el kinect cuenta con una cámara para reconocer el usuario y sus movimientos corporales, permitiendo que se seleccionen los archivos con movimientos de los brazos.

Para la sorpresa de todos, el kinect se incorporó a las salas de cirugía, al permitir que el cirujano acceda a los datos sobre la grade del bloque quirúrgico y sobre el paciente, historial clínico, exámenes de imagen y mucho más, moviendo apenas las manos. Como no necesita manejar nada, el médico no corre el riesgo de contaminarse, gana tiempo en el procedimiento y preserva la asepsia del centro quirúrgico. Esa tecnología en el contexto hospitalario ya existe en algunos hospitales brasileros.


Tabletas

Tras la llegada de los historiales clínicos electrónicos, nada más natural que hospitales evolucionando para procesos completamente digitales, dejando el uso del papel. Y una excelente forma de hacerlo es con el uso de las tabletas a la disposición de los médicos para uso en la evaluación de los pacientes y en la prescripción de medicinas, por ejemplo.

De esa forma, de cualquier lugar de la institución, el médico consigue modificar el historial, solicitar la aplicación de algún medicamento, incluir algún procedimiento en la lista de la facturación, conferir el historial médico del paciente y verificar algún resultado de examen. Ahí tenemos la desburocratización de las rutinas y la optimización del tiempo y el aumento de la productividad. Sin contar la disminución de los errores.

Wearables

Las tecnologías wearable (algo como tecnologías vestibles) en el área de la salud, permiten el monitoreo continuo de los signos vitales del paciente. Eso puede hacerse por medio de relojes, manillas, fajas abdominales, por ejemplo. Frecuencia cardiaca y respiratoria, presión arterial, disturbios del sueño e incluso la glucemia se puede analizar de esa forma.

En el futuro, se espera que el colesterol y muchos otros aspectos de la salud sean verificados por los dispositivos wearable y enviados para una base de datos que avise al médico en el caso de una modificación significativa. Todo eso permite que el paciente reciba un monitoreo desde cerca, sin dejar de vivir su rutina. De esa forma, no hay la necesidad dirigirse a un hospital todo el tiempo. Eso es muy importante en el caso de asistencia a personas mayores, pacientes en la cama o con enfermedades crónicas que necesitan control.

Impresoras 3D

Por medio de la fusión a laser, la fundición a vacuo y el moldeo por inyección, la impresión 3D permite crear objetos sólidos tridimensionales hechos de plástico o resinas sintéticas. En la Ortopedia, además de valvas de inmovilización de miembros fracturados, ya es posible producir prótesis, brazos robóticos y huesos para cirugías de implantes. ¡En los últimos años, el plástico está siendo sustituido por células! De esa forma, será posible imprimir células madre embrionarias, vasos sanguíneos, tejido cardiaco, piel u órganos completos (como una vejiga u una oreja) para trasplantes, lo que reduce o elimina cualquier riesgo de rechazo.

Vale resaltar que, en Brasil, el uso de implantes personalizados todavía no está regulado, una vez que es necesario pedir una autorización especial para hacer experimentos con la técnica. Mas las impresiones en 3D ya son usadas para la planificación y el entrenamiento de cirugías, pues posibilitan la reproducción que será operada, simulando la operación parte a parte. Con el equipo más preparado se puede reducir el tempo de cirugía y la cantidad de anestésicos que reciben los pacientes.

Impresoras 4D

Además de los resultados positivos de las impresoras 3D, la impresora 4D promete todavía mejores resultados. El hecho de ser 4D indica que el material creado consigue reaccionar a las características del ambiente en que se encuentra (como humedad y temperatura), modificando su forma con el tempo (eso sería la cuarta dimensión). En la salud, eso significaría que los implantes pueden ser adaptables al cuerpo del paciente, cuando lleguen al lugar correcto, permitiendo una compatibilidad todavía mayor entre las estructuras.

Disponibilidad de datos de salud

El almacenamiento en nube de historiales clínicos electrónicos permite que ese recurso abarque todo su potencial. Puede ser accedido desde cualquier aparato electrónico (desde que tenga acceso a una conexión por internet), de varios locales y por diversos profesionales al mismo tiempo, el expediente clínico electrónico permite que el ciudadano reciba el acompañamiento independiente de la institución que lo atendió. Eso colabora con la atención en red y con la integración del sistema ayudando en la construcción de un registro electrónico de salud único para cada paciente.

Asistencia remota

Por medio de las tecnologías wearable y de los aparatos de monitoreo cada vez más simples, prácticos y portátiles, las citas médicas a la distancia son cada vez más comunes. Desde su propia casa, el paciente puede contactarse con el médico, contar lo que siente y enviar sus datos vitales, permitiendo que diagnósticos simples y la indicación de medicamentos. Además, es posible el uso de la telemedicina y sus respectivos recursos para obtener una segunda opinión p recibir orientaciones para la realización de procedimiento.

Por medio del sistema robótico Da Vinci, las cirugías también se hacen de forma remota, contando siempre con el apoyo de un equipo local. Con el aparato, el cirujano especialista puede estar lejos del quirófano, y los brazos de la máquina controlados a la distancia. Esas son promesas de un futuro en la salud, pero el Colegio Federal de Medicina en Brasil todavía no permite la realización de cirugías remotas.

Big Data

Con la evolución de los sistemas de captura y análisis de datos y la digitalización de toda la atención médica, el sector de la salud podrá contar con los beneficios de la Big Data. Una cantidad muy grande de datos sobre la asistencia a la salud de millares de pacientes, procesados y analizados, generando informaciones útiles a los equipos. En este escenario sería posible identificar las correlaciones entre enfermedades, acompañar la progresión de epidemias y obtener los datos sobre los efectos adversos de medicinas, por ejemplo.

¿Usted ya conocía las tendencias de la tecnología hospitalaria?
¿Algunas ya están en su hospital?