No es de hoy que las soluciones de análisis y automatización de procesos estén en la cima de las prioridades de los gestores. En el sector de la salud, la adhesión de sistemas que hacen uso adecuado e inteligente de las informaciones es cada vez más común.

El uso de Bl (Business Intelligence) y de las soluciones analíticas muestra que crece gradualmente la preocupación no sólo por la eficiencia de los procesos, sino también por la precisión, principalmente durante la atención a un paciente en una institución de salud.

Un sistema de Bl es formado por herramientas de gestión estratégica personalizadas que permiten al gestor tener una visión macro de la empresa. Por lo tanto, la compartición de datos es uno de los puntos claves. Para hacer ese ambiente más práctico se necesita que las etapas sean de fácil manipulación para todos usuarios, intuitiva, eficiente y segura.

Entre los elementos cruciales para que el Business Intelligence funcione están: las personas y la viabilidad del sistema.

Personas
Para el éxito del proyecto se necesita tener en cuenta quien alimenta y manipula las soluciones. Como quien detiene el conocimiento son las personas, es muy importante prepararlas no sólo para la implementación de la herramienta, sino también para el uso continuo de ella.

El éxito de un Bl depende directamente del nivel de participación del equipo, por eso, se necesita desarrollar una cultura de Bl en la institución para que todos se adapten y comprendan la relevancia de los nuevos procesos. Entrenamientos continuos también son muy eficientes.

Viabilidad
Otra cuestión importante para la adopción en masa es la viabilidad de un sistema. El diseño de un sistema analítico en una institución de salud se hace considerando el comportamiento del usuario. Cuanto más fácil, más eficiente será intentar eliminar la resistencia del usuario, sea un sistema de Bl o un PEP (Expediente Electrónico del Paciente).

Para que eso ocurra, la interface es la más suave y simple posible. Usar íconos ya conocidos ayuda al usuario a identificar cuales acciones están disponibles. Además, es importante que él conozca la ruta recorrida hasta ese momento y la forma de hacer el recorrido de vuelta si es necesario.

Una interface amigable en un Bl permite al usuario transitar por él sabiendo cual es la ruta por recorrer y cómo actuar en el caso de dudas. Ese factor, sumado a un equipo comprometido, contribuyen decisivamente para intentar eliminar la resistencia del usuario y garantizar que el mismo adopte la herramienta Bl, o por qué no, un PEP (Expediente Electrónico del Paciente).