Integración de RIS y PEP permite informe médico más exacto

Tecnologías ofrecen informaciones inmediatas y más seguras, sin quitar el foco del diagnóstico

583.730x312.jpg

Tecnologías ofrecen informaciones inmediatas y más seguras, sin quitar el foco del diagnóstico

 

En los últimos 30 años, el uso del film en la radiología ha perdido su status de protagonista en exámenes de rayo-X y a menudo está saliendo de la escena. La radiología digital ha ganado espacio con información inmediata del Sistema de Almacenamiento y Comunicación de Imágenes (Picture Archiving and Communication System – PACS, en la sigla en inglés) que captura, almacena y comparte las imágenes por medio de redes y del Sistema de Información en  Radiología (Radiology Information System  - RIS, en la sigla en inglés).

El RIS es un sistema cuya base de datos puede ser integrada con éxito al PACS, facilitando el proceso comunicativo entre los dos para que la gestión de las imágenes sea más exacta al combinar con otros datos clínicos del paciente. Conseguir mantener un registro único del paciente es uno de los beneficios de la integración. El PACS permite que los datos sean cruzados y que las imágenes generadas por los equipamientos de exámenes puedan ser manipuladas hasta por acceso remoto.

El RIS puede ser accedido por internet desde cualquier lugar, y es compatible con diferentes sistemas de gestión, puede también integrarse al Historial Clínico Electrónico del Paciente (PEP), que reemplaza las prescripciones y los pedidos de exámenes en papel y permite que todos los datos de los usuarios queden almacenados en apenas un lugar.

Y es de esa unión del RIS con el PEP que se obtiene un informe médico más exacto, pues el médico radiólogo también tiene acceso al historial de salud del paciente, además de analizar la imagen del examen. De esa forma, los resultados deben ser menos susceptibles a errores y deben salir más rápidamente.

“El médico que tiene la interfaz del RIS puede accederlo por el computador. Y, para hacer clic en el historial médico del paciente, basta cambiar la pantalla”, afirma el consultor de la Folks TIC - Tecnología, Innovación y Conocimiento para la Salud, Heitor Gottberg. O sea, las informaciones estarán accesibles a un clic por medio del mismo equipamiento.

De acuerdo con Gottberg, la integración facilita la vida del profesional que atiende al paciente en caso de que tenga dudas en el diagnóstico. “Eso porque muchas veces él no conversa con el médico que hizo el pedido y, por lo tanto, no sabe las razones detalladas que han llevado a eso. Esa situación es muy común en hospitales en que el  profesional atiende al individuo, solicita el examen, pero quien hace el informe médico es otro, el radiólogo”, explica. Al acceder al  PEP, por medio del RIS, él consigue tener más informaciones para generar el informe médico, y en la misma hora.

Sin esa facilidad tecnológica, el radiólogo puede buscar el historial del paciente, pero necesita tiempo y desplazamiento, algo que ni siempre es posible debido al flujo de trabajo. El profesional podría también solicitar nuevos exámenes, por veces innecesarios, sin tener acceso a los datos médicos del usuario. O sea, la unión entre RIS y PEP agiliza resultados y elimina gastos innecesarios.

Con la digitalización de los exámenes, hay más una posibilidad: dictar el informe médico por medio de un sistema de reconocimiento de voz, y no habrá la necesidad de digitarlo – generalmente la etapa más lenta del proceso. Pues el tiempo de habla es menor que el tiempo de escrita y el resultado sale antes y sin errores.

Al colocar en la báscula el costo de adquisición de la tecnología y el retorno de esa inversión (Return of Investiment - ROI, en la sigla en inglés), es necesario levantar algunas cuestiones, orienta Gottberg: ¿Cuánto costa emitir un informe médico equivocado? Si eso ocurre, ¿con qué agilidad es posible corregir el error? ¿Cuáles son los daños permanentes? Respondidas esas preguntas, se percibe que el ROI, en este caso, es el avance de la seguridad en el momento de dar un veredicto sobre el examen del paciente.

Al disminuir los riesgos de error, debido a la integración del RIS con el PEP, todos tienen ventajas, especialmente el centro de medicina diagnóstica, pues el trabajo del radiólogo queda más rápido y él gana más tiempo, que puede ser utilizado para analizar otros exámenes. El local empieza a ofrecer una atención mejor y más segura.

El consultor destaca que la seguridad es el punto principal de atención después de la integración. Él recomienda que en los centros de medicina diagnóstica y hospitales se elijan  preferencialmente RIS que hagan backups automáticos, periódicos y previamente programados, como forma de proteger los dados de los pacientes. Otra forma de ampliar la seguridad y mantener el sigilo de las informaciones de los usuarios es adoptar la criptografía para proteger datos que circulan por e-mail o que están almacenados en otros dispositivos.

Es válido acordarse de que fallos humanos son las puertas de entrada más usadas por los hackers. El uso de pendrives, el abandono de la estación de trabajo sin hacer logout en el sistema, acceder a sitios no confiables y la realización de  downloads sospechosos configuran riesgos para la acción de criminales. Para evitar eso, el entrenamiento de personal es la mejor arma para el buen uso de la integración, que promueve más productividad a la institución y la seguridad del paciente.

;